Investigadores de la Sede Regional de Buga de la Universidad del Valle (Univalle) y empresas locales de la misma municipalidad trabajan juntos para disminuir los impactos ambientales de las actividades industriales y proteger la salud de los trabajadores.
A pesar de que existen normativas internacionales para la salud y seguridad de los trabajadores, (ISO 45001) y el medio ambiente, (ISO 14001), según los investigadores, las pequeñas y medianas empresas (PYMES), no siempre cuentan con los recursos necesarios que les permitan implementarlas y así mismo, analizar y resolver problemáticas ambientales y laborales de manera integrada.
Estudios de riesgos relacionados con los peligros físicos y químicos que se realizaron en dos PYMES en Buga fueron realizados por investigadores liderados por la profesora María del Pilar Rivera Diaz, una docente de la Sede Buga, adscrita al Programa Académico de Ingeniería Industrial de la Facultad de Ingeniería de Univalle.
"Nuestra meta fue analizar el impacto que ocasionan todos los contaminantes presentes a la salud del trabajador y al ambiente laboral basados en la normatividad legal vigente, para proponer estrategias que permitan a las empresas, conocer su desempeño ambiental y los posibles riesgos al trabajador de manera viable y sostenible dentro del proceso de la producción del alimento balanceado", dijo la profesora.
Los investigadores lograron brindar a las PYMES las herramientas para implementar un autodiagnóstico que les permita evaluar periódicamente los riesgos ambientales-laborales encontrados, de una manera integrada para controlarlos permanentemente.
Foto: Montaje de la bomba. Crédito: María del Pilar Rivera Diaz.
La Investigación
Según la profesora Rivera, dado que las empresas están dedicadas a la producción y distribución de alimento balanceado, se identificaron varios contaminantes que afectan la salud del trabajador y la calidad del medio ambiente laboral, pero lo más significativo fue la presencia de material particulado, específicamente el polvo respirable, que puede penetrar en los pulmones con un tamaño de 2,5 micras de diámetro.Los investigadores equiparon cinco empleados en las áreas de alta criticidad (dosificación, peletizado, ensacado, molienda y microingredientes) que tienen un impacto ambiental y afectan a la salud de los trabajadores en términos de enfermedad.
“Las empresas deben identificar los riesgos, medirlos, evaluarlos para priorizarlos y llevar a cabo, las medidas de mitigación y prevención”, explicó la profesora Rivera.
Con instrumentos de medición, durante 8 horas en su jornada laboral y en tres meses de observación, se evaluó la concentración de los peligros físicos y químicos, como el monóxido de carbono, ácido sulfhídrico, oxígeno, humedad, límites inferiores de explosividad, análisis de sílice y material particulado, para luego compararlos con los valores límites permisibles, propuestos por la Conferencia Americana de Higienistas Industriales Gubernamentales (ACGIH, por sus siglas en inglés) para el año 2021 y a través de la herramienta propuesta determinar la aceptabilidad del riesgo.
"Las empresas grandes tienen los recursos necesarios y la experticia para implementar las normas ISO (la Organización Internacional de Normalización, por sus siglas en inglés), pero el desconocimiento de las pequeñas y medianas empresas (PYMES) les genera incertidumbre en términos de tiempo y costos", dijo la profesora Rivera.
Además, el proyecto no sólo generó beneficios a los trabajadores y a las empresas, sino también a los estudiantes que apoyaron dicho proyecto.
“Es importante mencionar que tenemos egresados de la sede trabajando en estas áreas en empresas del municipio, que apoyan el Programa de Ingeniería Industrial y quienes se han vinculado a ellas, a través de sus prácticas profesionales”, agregó la profesora Rivera.
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Foto: Sede Buga de la Universidad del Valle. Crédito: Andrew James/NCC-FI/Univalle
La Sede Buga
La Sede Buga se inauguró el 6 de octubre de 1986 y está ubicada en la parte central del departamento del Valle del Cauca, Colombia, donde sirve a los municipios cercanos de Guacarí, El Cerrito, Ginebra, Yotoco, Restrepo y Darién.La profesora Laura Salas Arbeláez, Directora de sede dijo que el trabajo de la profesora Rivera es “inigualable": “Desde su conocimiento y relación con las empresas ha hecho que estas recurren constantemente a la Universidad del Valle Sede Buga para solucionar diferentes problemáticas, especialmente las asociadas al medioambiente y al sistema de seguridad y salud en el trabajo”, manifestó la profesora Arbeláez.
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La profesora Arbeláez planteó que es de vital importancia para las sedes regionales contar con grupos de investigación propios, que puedan atender necesidades desde diferentes disciplinas y campos de saber como lo son la filosofía, ingeniería, administración, contaduría y economía.
“Igualmente, permiten que los estudiantes de las sedes se articulen a la solución de problemáticas de su propio contexto y no tengan que trabajar sobre casos ajenos a su realidad”, manifestó la profesora Arbeláez.
“Igualmente, permiten que los estudiantes de las sedes se articulen a la solución de problemáticas de su propio contexto y no tengan que trabajar sobre casos ajenos a su realidad”, manifestó la profesora Arbeláez.
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