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| Foto: Andrés Mauricio Díaz. Crédito: Oficina de Comunicaciones de la Facultad de Ingeniería |
Las ansias por poner el conocimiento en práctica
Andrés Mauricio Díaz Caicedo, nacido en la ciudad de Cali, tuvo claro desde el principio que al escoger a la Universidad del Valle como su alma máter, iba a tener a su disposición múltiples escenarios para fortalecer su capacidad de investigación. Desde que se matriculó al primer semestre de la carrera, se preocupó por buscar grupos de investigación y semilleros, a través de los cuales poder hacer parte de procesos que le permitieran crecer tanto académica como profesionalmente. “Tenía esa gran visión desde el inicio, de cómo podía insertarme dentro de otros espacios que impulsan la carrera desde la parte técnica”, cuenta Andrés Mauricio.
Hacer parte de estos grupos supuso un gran desafío, que sorteó gracias a la disciplina y a un particular método de estudio. “Algo que realizaba era, primero, estudiar por mi cuenta. Leía el libro, veía las diapositivas, y trataba de ver cómo podía implementar lo que aprendía, para de ahí sacar la mayoría de las preguntas que creía que me podían servir en el mundo real, porque finalmente digo que se trata más de estudiar para el mundo real que para la academia”, explica, y añade que para que esto fuera posible fue crucial el acompañamiento que tuvo de sus docentes, quienes le dieron herramientas para relacionarse con otras personas interesadas en la materia.
Además, durante sus años como estudiante, Andrés aprovechó para cursar materias en otros programas académicos, entre los que estuvieron los de ciencias y economía, lo que contribuyó a tener una visión más amplia.
Esta visión multidisciplinar fue crucial para lo que vendría en su vida, cuando estructuró sus primeros proyectos, en los que trabajaría a la par que respondía con su carrera.
El fruto del trabajo duro
A pesar de que recientemente obtuvo su título profesional, Andrés Mauricio Díaz Caicedo cuenta hasta la fecha con más de 3 año de experiencia laboral. En un principio, estuvo en el área de ingeniería de mantenimiento, de controles y sistemas de producción. Luego de este periodo pasó a hacer parte de proyectos de investigación, producto de la asociación entre la Vicerrectora de Extensión de la Universidad del Valle y la Alcaldía de Cali y la Gobernación del Valle del Cauca. Eventualmente incursionó en terrenos académicos, al vincularse como investigador de la misma universidad, para los grupos de Control Industrial y Alta Tensión, gracias a un proyecto avalado por MinCiencias relacionado con integradores de fuentes no convencionales de energías renovables. “Considero que, al haber combinado la parte productiva de los elementos industriales, y luego de haber cambiado drásticamente de investigaciones, tenía ese enfoque de que a veces investigamos en elementos que no son tan requeridos”, cuenta.
Esta experiencia le permitió conocer las posibilidades que abre el trabajo conjunto, en especial para el futuro de las ingenierías, lo que redundó en su trabajo de grado, un modelo integrativo que combinó elementos propios de la ingeniería eléctrica, electrónica y de sistemas, y que ofreció como resultado final un modelo integrativo a partir del uso de algoritmos. “La industria necesita de personas jóvenes que tengan el conocimiento de cómo vamos a transformar el sector”, opina Andrés Mauricio, cuyo trabajo de grado obtuvo la distinción de Suma Cum Laude y quien actualmente se desempeña en la dirección de despacho energético en la empresa de energías XM.
Lo que viene para el futuro
Luego de recibir su título, y fiel al compromiso adquirido con la academia en función de la industria, Andrés Mauricio Díaz Caicedo está convencido de que quiere realizar sus estudios de posgrado. Su camino recorrido, a través de grupos de investigación y publicaciones derivadas de sus procesos en tales grupos, su horizonte es claro: “Esto me hace enfocarme hacia la parte de investigación, pero una investigación enfocada en el sector productivo. Quisiera aportar los conocimientos provenientes del medio internacional hacia el ámbito nacional”, comenta, y dice que el mejor consejo que le puede dar a quienes apenas comienzan esta apasionante etapa en sus vidas “es que, a pesar de que la carrera en ciertos momentos se torne difícil, o uno no sabe qué aplicabilidad pueden tener ciertas temáticas, es mejor plantearse esa posible aplicabilidad en el sector social, más que memorizarlas, que es algo muy común”.

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